Una vez todos subieron al barco tras unas cuantas, situaciones de lo mas curiosas, el capitán llego para partir del puerto junto a otros cuantos tripulantes mas. Era de esperarse el tirón inicial del barco, muy común incluso en los trenes cuando pasan del reposo al movimiento, así que mientras miraba hacia el cada vez mas lejano puerto no solté en ningún momento la batayola hasta que el famoso jefe del navío comenzó a hablar, momento en el que mire hacia el cielo, pero sobre todo a Amber, la cual me parecía que iba a explotar en cualquier momento si se quedaba unos segundos mas quieta.
Y tal cual fue como me imagine, tenia unos instintos muy parecidos a su personalidad, estaba claro que era de las yeguas que conseguían lo que querían de una manera u otra, usando lo que fuera necesario para ello, algo que no me interesaba si no por el único hecho de que eso podía ser peligroso, esa confianza podía ponerla en peligro pero no solo ha ella, si no a los demás, ya fuera con esa intención o no. De todas maneras, era cuestión de esperar a ver.
Tras el repaso de los "veteranos" quedo mas que claro que no iba a ser un viaje de crucero en el cual todos pudiéramos simplemente no hacer nada, por lo que tener que elegir un trabajo lo notaba mas como una obligacion que una decisión, pero al menos se podía elegir, así que me tocaba descartar.
Amber ya se puso junto a Quick, que aunque era uno de los primeros que iba a descartar por su prioridad con los pegasos, me sorprendió el que Amber pareciera en un momento dado el estar apunto de saltar hacia el pegaso, lo cual hubieras sido muy... divertido. Cuty se quedo con el capitán, o mas bien el capitán se quedo con la alicornio, lo cual me daba en que pensar en que clase de situaciones se encontraría hasta llegar a la isla.
Chirugo quedo fuera de mis posibilidades, ya que solo sabia vendar y curar heridas menores, cosas de trabajar con trenes. Lo mismo con el grifo, no me apetecía estar pelando patatas todo el trayecto, al menos que me dejara intentar cocinar algo y hundiera el barco con un incendio. Scroll quedaba fuera de lugar porque yo siendo terrestre no tendría mas que posibilidades de aprender runas, y tampoco era mi ilusión estudiar solo para ello.
Ardiente como tal no me agradaba mucho, pero Tinta si, aunque con mi demostración de cualidades de escritura en la inscripción mejor lo dejaba en un quizá. Eso solo me dejaba a Dolce y Fergus, lo cual no era mucho donde elegir, Fergus me recordaba al típico trabajador que solo se centra única y exclusivamente en su trabajo, por su presentación nada mas, y Dolce tenia el problema de que junto a ella te hacías la pregunta de que "¿No crees que existe demasiada felicidad en el mundo?" así que me sorprendió que Amber no fuera con ninguno de los dos, ya por la personalidad de Dolce, o porque los polos opuestos se atraen, como con Fergus.
Igual ya había tomado una decisión. Me acerque a Fergus, le mire durante unos segundos directamente a los ojos, y me senté para alzar mi vista a las velas, para posteriormente mirar de reojo a los demás. Esta era la mejor manera de tratar a quienes eran como yo pensaba que era este herrero, así o presionándolo al máximo, pero esto era lo que mas me interesaba, ya por este mismo veterano y para cubrir mis deseos de volver a tocar con mis pezuñas el tan frió como cálido metal, y el sudor frente al fuego.