He leido solo el capitulo 1 y el prologo, y me gusta como escribes y lo que cuentas. en otro momento, leere el resto.
[/quote]Gracias y me alegro haber hecho algo que te haya gustado.
[quote="Volgrand";p=257116]Lo leí casi cuando lo publicaste y se me fue comentar. oooops !
Me ha gustado mucho, una historia de vidas cotidianas con un tinte de aventura. maldito grifo , deja a nuestra poni tranquila![/quote]
¿Nuestra poni? Jajajajajaja, me encanta eso, ciertamente me hace parecer que me lo he currado mucho (aunque lo haya hecho)
[quote="Nahyo";p=256039]Me he leído lo que hay de la historia y me gusta mucho, está interesante. Esperaré con ansias el próximo capítulo,
un saludo,
Nahyo.[/quote]
Vale, tu ganas ...
Capítulo 5 - Sucesos en el lago de Central Park
Spoiler:
[center]Capítulo 5 - Sucesos en el lago de Central Park[/center][/size]
Observe como se levantaba para ver lo que hacía, pero al colocarme abajo pensaría que estaba dormida y había descendido allí por el sueño.
Mientras tanto, miraba como manejaba el timón hacía el final del lago, pasando entre barcas con ponis por el sonido y aproveché para moverme haciendo que chocaría con la barca que estaba oyendo. Como deseaba uno de los dos que estaban en la barca se levanto:
[list][*]¿No ves a los demás o es que te crees mejor que los ponis, grifo?[/list]
Nada más oírle intente gritar pero no pude, la garganta me picaba y sentía que mis labios se pegaban entre si, no podía hacerlo por algo que había en la barca pues la galleta no me los había tocado siquiera. El grifo no contestó e hizo que su barca se alejara, pensé que evitaba los enfrentamientos. Pero no era así el de la otra barca, cuando el grifo ya estaba virando para alejarse de él, el poni fue hacía ese lado y se puso enfrente de la nuestra.
[list][*]Gallina, ¿es que no sabes hablar? — volviendo a hablar el poni,aunque todavía no veía nada de él.[/list]
Me di cuenta que ese era un insulto enmascarado, hecho a cualquiera que tuviese alas, como los pegasos o los grifos. También percibía las coces del otro ocupante de la barca, estaba perdiendo la paciencia, y el cambio de voz del que había hablado, había algo por lo que tenía ira y no sabía la causa.
Sin embargo no podía pensar demasiado, debía llegar a la proa y saltar desde allí, antes de que el grifo se diese cuenta que estaba despierta, porque en breve se alejaría la otra barca y, posiblemente, cualquier intento que podría pensar para escapar. Me arrastré con sumo cuidado pero el grifo estaba atento y tuve la mala suerte de moverme justo cuando miraba en mi dirección, mucho antes de alcanzar una posición que me vieran los de la otra barca. Al verme moverme debió decidir que alzar el vuelo era conveniente, pues apoyo sus patas en una tabla y voló hacía donde estaba el otro pero moví la barca sin pretenderlo, justo en un momento que el grifo estaba completamente en el aire.
[list][*]¿Te has fijado? Se ha movido la barca — dijo, alterada, una poni que había en la otra barca y a la que no podía ver bien, solo percibía que su voz era femenina.
[*]¿Que tienes ahí, gallina? — preguntó, esta vez más airado, el mismo poni que hablo en las dos ocasiones anteriores.[/list]
Otra vez no contestó, momento en el que el poni salto a la barca con un movimiento ágil y que apenas movió ambas; ¿cómo lo había hecho? No me dio tiempo para pensar una respuesta, tenía que ir hacía allí y otra vez moví la barca. Vi como el grifo atacaba al poni con el remo pero este se movió en el último momento, evitando por completo el ataque; en ese instante el poni dio un tirón, con las patas de atrás, al remo que hizo vibrar la embarcación, echando toda la carga hacía uno de los lados, haciendo bastante ruido y raspando un poco mi pata derecha delantera.
[list][*]Vaya, por eso no contestabas — asevero el poni, mirando con odio al grifo — Sube a las tablas, pequeña, y no te preocupes. Curtain, aquí necesitan ayuda — manifestó sin mirar a la poni, pero imagine que se lo decía a ella.[/list]
Subí con cuidado a la tabla y el poni se puso en la misma mientras esperaba el ataque del otro, a los pocos segundos vi un aura entorno a mí, que parecía despegarme de las maderas, y no me resistí. Tardo muy poco en llevarme a la otra barca y cuando estuve allí la unicornio me hizo señas para que iría donde estaba. Fui a la misma tabla que ella, pero un poco alejada por si no le gustaba que se pegasen tanto.
[list][*]No va a pasar nada, Risky sabe lo que se hace — me dijo, sonriendo, la unicornio. Tras eso se acerco un poco más y me dijo susurrando — Aunque tiene muy mala paciencia, sobretodo cuando esta conmigo.[/list]
No pude hacer otra cosa que asentir, y me fije en la unicornio. Era marrón grisáceo con un pelo bastante corto, si no la hubiese oído hablar pensaría que se trataba de un semental con rasgos algo femeninos, pero su voz no engañaba sobre ello. También me fije en el poni, era todo lo contrario a ella, de un color azul oscuro con un peinado algo alargado y cuidado, aunque su cola estuviese cortada, que enamoraría a quien se propusiese; sin embargo, no tuve mucho tiempo pues cuando estaba mirando el grifo ataco y esta vez llevaba un cuchillo.
Otra vez lo esquivo o eso me pareció y esta vez aprovecho para darle un coz en el ala derecha, que pareció molestar al grifo pese a no haber hecho demasiado daño. En ese instante el poni se confió un poco y fue a por el remo que le había arrebatado al otro, pero el grifo acelero consiguiendo darle antes de que lo tendría. Vi como el poni se contorsionaba un poco y cuando volvió a pasar volando le intento dar con el remo, pero este se rompió. Lejos de tirar la madera, como esperaba que hiciese, se la quedo y cuando el grifo estaba cerca, salto. Los segundos que duro el salto fueron largos, pues el poni hizo una cabriola e intento clavar la madera en el ala izquierda, algo que casi consiguió; pero no del todo y el grifo aprovecho para coger de una pata al poni y lanzarlo hacía atrás en un intento desesperado.
Pero consiguió su objetivo y volvió a atacar a sus siguientes objetivos, nosotras, y no sabía como podría hacer algo en esa situación. No tuve que pensar demasiado pues la unicornio empezó a emitir otra vez y vi las sogas izarse de ambas barcas, yendo hacía el grifo. Esquivo la primera, la que tenía la barca en que estaba ahora, pero la segunda que era de la otra se enredo en el ala que el poni había dañado algo y el grifo cayó al agua, donde el poni le propino una coz con la pata delantera en la cara justo en ese momento. La unicornio subió primero al poni, que se tumbo en la proa y tras eso al grifo, atando con el cabo que había usado las alas y con el otro las patas traseras.
[list][*]Estoy cansado, ¿puedes manejar los remos?
[*]Bien, ¿a que orilla crees que deberíamos ir?
[*]A ninguna, ves ese cisne azul oscuro sin pico — dijo el poni y ella asintió pues se veía bastante bien por las luces — Vamos hacía allí y si puedes dejar que la otra barca siga un curso errático hacía donde iba sería mejor.[/list]
Lo hizo y me maraville de ello, los unicornios que había en Hollow Shades tenían que estar dirigiendo todo el rato, pero su compañero parecía estar enterado sobre lo que podía hacer. Seguí mirando la otra barca y parecieron notar algo en eso.
[list][*]¿Te extraña? — dijo la unicornio, que seguía usando su magia para que los remos se moverían. Asentí pues cada vez me picaba más la garganta — Es que soy telonera y muchas veces me mandan siempre lo mismo, tanto que he aprendido a manejar las descargas mágicas para que hagan pequeñas labores como mover algo en una dirección y gastar menos energía con ello.
[*]No te creas que es sencillo — aseveró el poni, mirando a la unicornio como si no hubiese una poni más bella que ella en todo el mundo — He visto algunos que hacen algo parecido, unos cuantos de ellos también son teloneros, pero ella parece hacer que todo vibre con su magia.
[*]Halagador, pero solo tú dices eso — refunfuñó la unicornio, apartando la mirada — Y no te creas nada de lo que diga sobre mí, siempre exagera.[/list]
Conseguí hacer una risita ante ese comentario mientras veía al poni enrojecer, pero había visto esa clase de afecto en mis padres y algunas parejas que iban a casarse. Pensé que les había arruinado el momento y me sentí mal por ello, igual iba a pedirle en matrimonio o habían salido a relajarse y les había interrumpido. Unos minutos más tarde, notaba la garganta ardiendo y que necesitaba beber pero la cesta estaba en el lugar del poni, me sentía cansada y no quería pasar por donde estaba el grifo, así que le di unos toques en la pezuña a la unicornio.
[list][*]Ah si, debes tener sed — expresó la unicornio en voz baja — ¿Que prefieres, ir allí o que traiga hacía aquí la cesta?[/list]
Hice señas para ir allí y otra vez uso su magia, parando los remos con ello, para llevarme al otro lado de la barca. Una cosa era simular el movimiento de algo, otra era controlarlo y puede que algún poni lo consiguiese pero ella no se había arriesgado.
Cuando llegue al lado del poni vi que estaba más cansado y recostado en la barca, con una pata sobre un costado en el que se veía un corte en la ropa. Me di cuenta que le había herido y no podía dejar que seguiría igual. Miré en la canastilla que había a mi lado, había unas servilletas, no serían vendas pero ciertamente eran mejores que la tela doblada que tenía hasta ahora. Caminé un poco hasta donde estaba Risk y le di las servilletas.
Miré el corte cuando se quito la pezuña de la herida, no sabía de las heridas cortantes, pero esa no tenía buen aspecto aunque la cazadora parecía bastante dura y había detenido algo el ataque. Lo que me extraño es que no se los pusiese inmediatamente, en su lugar hizo un nudo con tres de ellas que puso en la herida y que cubría totalmente el desgarrón que tenía, realmente no era su primera herida y sabía lo que hacer, pero parecía grave y el hecho de no haberlo dicho a su compañera me extrañaba sobremanera. Saque una botella con agua de la canastilla pero en ese instante …
[list][*]No bebas — dijo el poni, le mire extrañada pero le hice caso y separé la botella de mis labios.
[*]Risk, ¿has decidido, otra vez, hacer las cosas tu solo? — dijo la unicornio con todo mosqueado.
[*]Si y por una vez ha venido bien.
[*]No para ti, estas herido, agotado y si hubiese alguno por la zona podrían curar eso.
[*]No es tan sencillo.
[*]Para mi lo es — manifestó la unicornio con el mismo tono que antes — Podías tener a alguien aquí ayudando un poco.
[*]Peligroso. [/list]
Me di cuenta que estaban peleando demasiado para ser solo por lo dicho, la voz de ella resultaba tensa por algo más que lo dicho en un principio; estaba preocupada por él y habiendo visto la herida tenía razones para ello. El poni se recostó y tras respirar un poco abrió los ojos, mirando en mi dirección con una sonrisa irónica.
[list][*]Pero, ¿donde están nuestros modales? — preguntó — Se nos ha olvidado presentarnos, pequeña — negué con la cabeza, aunque quería saber quien me había salvado, ya habría otros momentos — Mi nombre es Risk Trainer y me dedico a doblar actores en las escenas peligrosas; en cuanto a mi compañera es Curtain Lifter y como ha dicho es telonera, de las que manejan los aparejos en los teatros.[/list]
Quise contestar “encantada” y decir mi nombre pero no salió ningún sonido de mi boca, lo cual debió notar Risk pues dijo.
[list][*]No te fuerces, es lo mejor en este instante.
[*]No puedes hablar, ¿verdad? — manifestó Curtain Lifter, pero no pude hacer otra cosa que asentir y poner mi pezuña en la garganta, aunque quisiera decirles mi nombre seguía sintiendo el mismo ahogo que antes — No te preocupes, ya nos enteraremos de alguna manera.[/list]
Volví a asentir, más rotundamente, para indicarles que lo comprendía.
Cuando estábamos cerca de la otra barca noté que los remos iban más lento, como si esperase algo por parte de ella. Pero la barca se movió hacía otro lado y vi como Risk señalaba las linternas. La unicornio hizo que las luces se iluminaran completamente dos veces, una señal sencilla que cualquiera revisaría si es que no estaba por casualidad allí y la barca del cisne azul oscuro se acerco a esta.
[list][*]Esa luz molesta a las otras barcas — formuló alguien en la otra barca — Hagan el favor de evitar su uso.
[*]Lo lamentamos, pero teníamos que hacer algo — aseveró Curtain, poniendo especial énfasis en las ultimas palabras.
[*]¿A que se debe? — pregunto el unicornio, ahora que le veía mejor, de la otra barca.
[*]Ese grifo ha intentado secuestrar a la potrilla pero esta ha hecho lo suficiente para que la rescatemos — dijo Risk acariciando mi pelo, como para calmarme y que supiese lo bien que lo había hecho.
[*]Seguidme — dijo el unicornio que volvió la barca hacía la orilla que había salido.[/list]
Intenté decirles que no me fiaba pero ellos parecían hacerlo y Curtain volvió a usar su magia en los remos, siguiendo al cisne extraño hacía donde les llevaba mientras Risk parecía ignorar mis intentos por decir algo sobre ello. Conforme más navegábamos, menos barcas se veían, como había sucedido en la orilla que había partido. Finalmente se vio hacía donde se dirigía, había una esclusa enorme de la que colgaban otras dos barcas parecidas y detrás de ellas parecían haber otras puertas para retirar el agua a los canales. Encima había unos cuantos pegasos, sentados en parapetos que daban al parque y unos cuantos de ellos estaban mirando por catalejos a todos los lugares factibles de secuestrar a quien viesen solo. ¿Que hacían allí y por qué no se extrañaban estos de su presencia? Pero entonces caí en la cuenta, Risk y Curtain parecían saber que sucedía algo aquí, ¿por eso se habían peleado antes? Estaba claro que no conseguiría respuestas mientras no llegásemos a la esclusa, cuando ya sería demasiado tarde, solo podía confiar en que no sería tan malo o peor que lo sucedido en el lago.
Observe como se levantaba para ver lo que hacía, pero al colocarme abajo pensaría que estaba dormida y había descendido allí por el sueño.
Mientras tanto, miraba como manejaba el timón hacía el final del lago, pasando entre barcas con ponis por el sonido y aproveché para moverme haciendo que chocaría con la barca que estaba oyendo. Como deseaba uno de los dos que estaban en la barca se levanto:
[list][*]¿No ves a los demás o es que te crees mejor que los ponis, grifo?[/list]
Nada más oírle intente gritar pero no pude, la garganta me picaba y sentía que mis labios se pegaban entre si, no podía hacerlo por algo que había en la barca pues la galleta no me los había tocado siquiera. El grifo no contestó e hizo que su barca se alejara, pensé que evitaba los enfrentamientos. Pero no era así el de la otra barca, cuando el grifo ya estaba virando para alejarse de él, el poni fue hacía ese lado y se puso enfrente de la nuestra.
[list][*]Gallina, ¿es que no sabes hablar? — volviendo a hablar el poni,aunque todavía no veía nada de él.[/list]
Me di cuenta que ese era un insulto enmascarado, hecho a cualquiera que tuviese alas, como los pegasos o los grifos. También percibía las coces del otro ocupante de la barca, estaba perdiendo la paciencia, y el cambio de voz del que había hablado, había algo por lo que tenía ira y no sabía la causa.
Sin embargo no podía pensar demasiado, debía llegar a la proa y saltar desde allí, antes de que el grifo se diese cuenta que estaba despierta, porque en breve se alejaría la otra barca y, posiblemente, cualquier intento que podría pensar para escapar. Me arrastré con sumo cuidado pero el grifo estaba atento y tuve la mala suerte de moverme justo cuando miraba en mi dirección, mucho antes de alcanzar una posición que me vieran los de la otra barca. Al verme moverme debió decidir que alzar el vuelo era conveniente, pues apoyo sus patas en una tabla y voló hacía donde estaba el otro pero moví la barca sin pretenderlo, justo en un momento que el grifo estaba completamente en el aire.
[list][*]¿Te has fijado? Se ha movido la barca — dijo, alterada, una poni que había en la otra barca y a la que no podía ver bien, solo percibía que su voz era femenina.
[*]¿Que tienes ahí, gallina? — preguntó, esta vez más airado, el mismo poni que hablo en las dos ocasiones anteriores.[/list]
Otra vez no contestó, momento en el que el poni salto a la barca con un movimiento ágil y que apenas movió ambas; ¿cómo lo había hecho? No me dio tiempo para pensar una respuesta, tenía que ir hacía allí y otra vez moví la barca. Vi como el grifo atacaba al poni con el remo pero este se movió en el último momento, evitando por completo el ataque; en ese instante el poni dio un tirón, con las patas de atrás, al remo que hizo vibrar la embarcación, echando toda la carga hacía uno de los lados, haciendo bastante ruido y raspando un poco mi pata derecha delantera.
[list][*]Vaya, por eso no contestabas — asevero el poni, mirando con odio al grifo — Sube a las tablas, pequeña, y no te preocupes. Curtain, aquí necesitan ayuda — manifestó sin mirar a la poni, pero imagine que se lo decía a ella.[/list]
Subí con cuidado a la tabla y el poni se puso en la misma mientras esperaba el ataque del otro, a los pocos segundos vi un aura entorno a mí, que parecía despegarme de las maderas, y no me resistí. Tardo muy poco en llevarme a la otra barca y cuando estuve allí la unicornio me hizo señas para que iría donde estaba. Fui a la misma tabla que ella, pero un poco alejada por si no le gustaba que se pegasen tanto.
[list][*]No va a pasar nada, Risky sabe lo que se hace — me dijo, sonriendo, la unicornio. Tras eso se acerco un poco más y me dijo susurrando — Aunque tiene muy mala paciencia, sobretodo cuando esta conmigo.[/list]
No pude hacer otra cosa que asentir, y me fije en la unicornio. Era marrón grisáceo con un pelo bastante corto, si no la hubiese oído hablar pensaría que se trataba de un semental con rasgos algo femeninos, pero su voz no engañaba sobre ello. También me fije en el poni, era todo lo contrario a ella, de un color azul oscuro con un peinado algo alargado y cuidado, aunque su cola estuviese cortada, que enamoraría a quien se propusiese; sin embargo, no tuve mucho tiempo pues cuando estaba mirando el grifo ataco y esta vez llevaba un cuchillo.
Otra vez lo esquivo o eso me pareció y esta vez aprovecho para darle un coz en el ala derecha, que pareció molestar al grifo pese a no haber hecho demasiado daño. En ese instante el poni se confió un poco y fue a por el remo que le había arrebatado al otro, pero el grifo acelero consiguiendo darle antes de que lo tendría. Vi como el poni se contorsionaba un poco y cuando volvió a pasar volando le intento dar con el remo, pero este se rompió. Lejos de tirar la madera, como esperaba que hiciese, se la quedo y cuando el grifo estaba cerca, salto. Los segundos que duro el salto fueron largos, pues el poni hizo una cabriola e intento clavar la madera en el ala izquierda, algo que casi consiguió; pero no del todo y el grifo aprovecho para coger de una pata al poni y lanzarlo hacía atrás en un intento desesperado.
Pero consiguió su objetivo y volvió a atacar a sus siguientes objetivos, nosotras, y no sabía como podría hacer algo en esa situación. No tuve que pensar demasiado pues la unicornio empezó a emitir otra vez y vi las sogas izarse de ambas barcas, yendo hacía el grifo. Esquivo la primera, la que tenía la barca en que estaba ahora, pero la segunda que era de la otra se enredo en el ala que el poni había dañado algo y el grifo cayó al agua, donde el poni le propino una coz con la pata delantera en la cara justo en ese momento. La unicornio subió primero al poni, que se tumbo en la proa y tras eso al grifo, atando con el cabo que había usado las alas y con el otro las patas traseras.
[list][*]Estoy cansado, ¿puedes manejar los remos?
[*]Bien, ¿a que orilla crees que deberíamos ir?
[*]A ninguna, ves ese cisne azul oscuro sin pico — dijo el poni y ella asintió pues se veía bastante bien por las luces — Vamos hacía allí y si puedes dejar que la otra barca siga un curso errático hacía donde iba sería mejor.[/list]
Lo hizo y me maraville de ello, los unicornios que había en Hollow Shades tenían que estar dirigiendo todo el rato, pero su compañero parecía estar enterado sobre lo que podía hacer. Seguí mirando la otra barca y parecieron notar algo en eso.
[list][*]¿Te extraña? — dijo la unicornio, que seguía usando su magia para que los remos se moverían. Asentí pues cada vez me picaba más la garganta — Es que soy telonera y muchas veces me mandan siempre lo mismo, tanto que he aprendido a manejar las descargas mágicas para que hagan pequeñas labores como mover algo en una dirección y gastar menos energía con ello.
[*]No te creas que es sencillo — aseveró el poni, mirando a la unicornio como si no hubiese una poni más bella que ella en todo el mundo — He visto algunos que hacen algo parecido, unos cuantos de ellos también son teloneros, pero ella parece hacer que todo vibre con su magia.
[*]Halagador, pero solo tú dices eso — refunfuñó la unicornio, apartando la mirada — Y no te creas nada de lo que diga sobre mí, siempre exagera.[/list]
Conseguí hacer una risita ante ese comentario mientras veía al poni enrojecer, pero había visto esa clase de afecto en mis padres y algunas parejas que iban a casarse. Pensé que les había arruinado el momento y me sentí mal por ello, igual iba a pedirle en matrimonio o habían salido a relajarse y les había interrumpido. Unos minutos más tarde, notaba la garganta ardiendo y que necesitaba beber pero la cesta estaba en el lugar del poni, me sentía cansada y no quería pasar por donde estaba el grifo, así que le di unos toques en la pezuña a la unicornio.
[list][*]Ah si, debes tener sed — expresó la unicornio en voz baja — ¿Que prefieres, ir allí o que traiga hacía aquí la cesta?[/list]
Hice señas para ir allí y otra vez uso su magia, parando los remos con ello, para llevarme al otro lado de la barca. Una cosa era simular el movimiento de algo, otra era controlarlo y puede que algún poni lo consiguiese pero ella no se había arriesgado.
Cuando llegue al lado del poni vi que estaba más cansado y recostado en la barca, con una pata sobre un costado en el que se veía un corte en la ropa. Me di cuenta que le había herido y no podía dejar que seguiría igual. Miré en la canastilla que había a mi lado, había unas servilletas, no serían vendas pero ciertamente eran mejores que la tela doblada que tenía hasta ahora. Caminé un poco hasta donde estaba Risk y le di las servilletas.
Miré el corte cuando se quito la pezuña de la herida, no sabía de las heridas cortantes, pero esa no tenía buen aspecto aunque la cazadora parecía bastante dura y había detenido algo el ataque. Lo que me extraño es que no se los pusiese inmediatamente, en su lugar hizo un nudo con tres de ellas que puso en la herida y que cubría totalmente el desgarrón que tenía, realmente no era su primera herida y sabía lo que hacer, pero parecía grave y el hecho de no haberlo dicho a su compañera me extrañaba sobremanera. Saque una botella con agua de la canastilla pero en ese instante …
[list][*]No bebas — dijo el poni, le mire extrañada pero le hice caso y separé la botella de mis labios.
[*]Risk, ¿has decidido, otra vez, hacer las cosas tu solo? — dijo la unicornio con todo mosqueado.
[*]Si y por una vez ha venido bien.
[*]No para ti, estas herido, agotado y si hubiese alguno por la zona podrían curar eso.
[*]No es tan sencillo.
[*]Para mi lo es — manifestó la unicornio con el mismo tono que antes — Podías tener a alguien aquí ayudando un poco.
[*]Peligroso. [/list]
Me di cuenta que estaban peleando demasiado para ser solo por lo dicho, la voz de ella resultaba tensa por algo más que lo dicho en un principio; estaba preocupada por él y habiendo visto la herida tenía razones para ello. El poni se recostó y tras respirar un poco abrió los ojos, mirando en mi dirección con una sonrisa irónica.
[list][*]Pero, ¿donde están nuestros modales? — preguntó — Se nos ha olvidado presentarnos, pequeña — negué con la cabeza, aunque quería saber quien me había salvado, ya habría otros momentos — Mi nombre es Risk Trainer y me dedico a doblar actores en las escenas peligrosas; en cuanto a mi compañera es Curtain Lifter y como ha dicho es telonera, de las que manejan los aparejos en los teatros.[/list]
Quise contestar “encantada” y decir mi nombre pero no salió ningún sonido de mi boca, lo cual debió notar Risk pues dijo.
[list][*]No te fuerces, es lo mejor en este instante.
[*]No puedes hablar, ¿verdad? — manifestó Curtain Lifter, pero no pude hacer otra cosa que asentir y poner mi pezuña en la garganta, aunque quisiera decirles mi nombre seguía sintiendo el mismo ahogo que antes — No te preocupes, ya nos enteraremos de alguna manera.[/list]
Volví a asentir, más rotundamente, para indicarles que lo comprendía.
Cuando estábamos cerca de la otra barca noté que los remos iban más lento, como si esperase algo por parte de ella. Pero la barca se movió hacía otro lado y vi como Risk señalaba las linternas. La unicornio hizo que las luces se iluminaran completamente dos veces, una señal sencilla que cualquiera revisaría si es que no estaba por casualidad allí y la barca del cisne azul oscuro se acerco a esta.
[list][*]Esa luz molesta a las otras barcas — formuló alguien en la otra barca — Hagan el favor de evitar su uso.
[*]Lo lamentamos, pero teníamos que hacer algo — aseveró Curtain, poniendo especial énfasis en las ultimas palabras.
[*]¿A que se debe? — pregunto el unicornio, ahora que le veía mejor, de la otra barca.
[*]Ese grifo ha intentado secuestrar a la potrilla pero esta ha hecho lo suficiente para que la rescatemos — dijo Risk acariciando mi pelo, como para calmarme y que supiese lo bien que lo había hecho.
[*]Seguidme — dijo el unicornio que volvió la barca hacía la orilla que había salido.[/list]
Intenté decirles que no me fiaba pero ellos parecían hacerlo y Curtain volvió a usar su magia en los remos, siguiendo al cisne extraño hacía donde les llevaba mientras Risk parecía ignorar mis intentos por decir algo sobre ello. Conforme más navegábamos, menos barcas se veían, como había sucedido en la orilla que había partido. Finalmente se vio hacía donde se dirigía, había una esclusa enorme de la que colgaban otras dos barcas parecidas y detrás de ellas parecían haber otras puertas para retirar el agua a los canales. Encima había unos cuantos pegasos, sentados en parapetos que daban al parque y unos cuantos de ellos estaban mirando por catalejos a todos los lugares factibles de secuestrar a quien viesen solo. ¿Que hacían allí y por qué no se extrañaban estos de su presencia? Pero entonces caí en la cuenta, Risk y Curtain parecían saber que sucedía algo aquí, ¿por eso se habían peleado antes? Estaba claro que no conseguiría respuestas mientras no llegásemos a la esclusa, cuando ya sería demasiado tarde, solo podía confiar en que no sería tan malo o peor que lo sucedido en el lago.
