Mawaru Penguindrum es la historia de tres hermanos, Kanba el mayor, Shouma el mediano y Himari la pequeña. Esta última padece una grave enfermedad sin tratamiento, la cual amenaza con acabar con su vida en cualquier momento. Un día, sin embargo, Himari encuentra un extraño sombrero capaz de detener el progreso de su enfermedad y mejorar radicalmente su estado de salud cuando se lo pone. Además, de forma absolutamente surrealista y coincidiendo con el hallazgo del sombrero, aparecen también de la nada tres pingüinos (sí, pingüinos) invisibles para el resto de la gente que siguen a todas partes a los protagonistas.
No quiero contaros más del surrealista argumento para no hacer ningún spoiler. Solo recomiendo ver este anime a todo aquél que disfrute con series simbólicas, peculiares y diferentes. Destaco especialmente el simbolismo de esta serie: cuando la terminéis seguramente os quedaréis un poco WTF, ya que el final del anime no te lo da todo masticado; es el espectador el que debe analizar un poco lo que ha visto y sacar sus propias conclusiones de lo sucedido.
Además creo que esta serie puede gustar bastante al público Brony ya que comparte algo en común con MLP: personajes muy trabajados. Siempre se ha dicho que uno de los puntos fuertes de My Little Pony era gozar de unos personajes coherentes y atractivos al espectador, y Mawaru Penguindrum también puede presumir de ello. Y otro punto a favor de esta serie es la excelente calidad visual, en este aspecto también se han esforzado mucho.
Y bueno, no me enrollo más: no es una serie demasiado larga, diría que tiene 24 capítulos. La recomiendo a todo aquél que tenga ganas de ver una serie de calidad visual que comienza en clave de humor y lleno de situaciones cómicas gracias al trío de pingüinos, y que poco a poco se va convirtiendo en una serie más oscura, más seria y más profunda sobre la que se puede debatir durante horas.
