Mensaje por EdoNova » 14 Jun 2014, 09:10
Bien, os traigo otro capítulo, este lo he pensado un poco, y no estoy seguro de si será bueno o no, pero espero que os guste. (AVISO: Es un homenaje al capítulo 9 de la primera temporada)
Pollinosis
Era una tarde tranquila, había quedado con Ruby, Dust, y Brave Heart para ir a hacer un picnic al bosque Ever Free, mientras que mis hermanas estaban, una con las Crusaders, y la otra pasando la tarde con Fluttershy. Tras un largo tiempo hablando, y riendo, acabamos llegando a un claro lleno de flores azules.
-Este será un buen sitio para hacer el picnic. -decía Brave Heart, extendiendo el mantel.
- ¿Y cómo estas tan segura? -le preguntó Dust.
-Simplemente, lo sé.
-Bueno... No os peleéis... -decía Ruby, como si tuviera alma maternal, empezando a sacar los platos.
Yo, dejé a un lado la cesta con la comida, y empecé a dibujar después de tanto tiempo, plasmando la imagen de aquellas flores azules. De vez en cuando, mis amigos me observaban lo que dibujaba.
-Si que eres bueno. -decía Ruby admirando.
Al tenerlos a todos encima mientras yo dibujaba, era algo que me ponía colorado. Pasamos un buen rato jugando y divirtiéndonos, Brave Heart y Dust, se revolcaban en aquellas flores azules, mientras que Ruby, las olía de vez en cuando. De pronto, llegó un momento en que nos entró el hambre a la vez.
-Me parece que ya es hora de comer. -declaraba Dust. - ¡Eh Loud, ve sacando los sándwiches en lo que voy a buscar agua!
Asentí mientras guardaba mis materiales, usando mi magia para sacar los sándwiches de lechuga, tulipanes y tomate que preparamos antes de salir de casa. Dust, no tardó mucho en volver con la cantimplora hasta arriba de agua, en cuanto llegó, empezamos a comer.
-Si que están ricos estos sándwiches. -decía Brave Heart.
-Gracias, los preparé antes de salir de casa. -contestaba Ruby.
De pronto, empezó a soplar el viento fuertemente, arrastrando los pétalos de aquellas flores con él. Mientras soplaba, no me percaté de que uno de aquellos pétalos se coló en mi sándwich hasta que me encontré masticándolo y tragándolo sin querer.
Las horas pasaron, y recogimos las cosas, tras salir del bosque Ever Free, me despedí de mis amigos y me dirigí a la casa de Fluttershy, para recoger a Greenkey.
Ya en su casa, toqué a la puerta, Fluttershy no tardó en abrirme.
-Hola Loud. -me saludaba.
Yo, le respondí usando mi pizarra: "Buenas noches, Fluttershy, ¿qué tal está Greeny?"
- ¡Oh! Ella está bien, ha estado toda la tarde jugando con los animalitos. -me respondió. - ¡Greeny, tu hermano ha venido a buscarte!
Al oírla, Greenkey dejó a Ángel en el suelo, y recogió su hurón de peluche, viniendo hacia mí.
- ¡Hola hermanito! -decía Greeny abrazándose a una de mis patas.
-Sin duda quieres a tu hermano, ¿verdad? -le decía Fluttershy a Greenkey.
- ¡Si, mami Fluttershy!
Eso le pilló por sorpresa a la tímida Fluttershy.
- ¿Ma... Mami? -decía colorada. -Qué vergüenza.
Usé mi magia para decirle a Fluttershy: "Muchas gracias por cuidarla, espero contar contigo para cuidarla de vez en cuando"
-Es un placer Loud, buenas noches.
- ¡Buenas noches, Fluttershy! -le decía Greenkey.
Acomodé a Greenkey sobre mi lomo, y nos fuimos a casa, saludando a Fluttershy hasta que cruzamos el puente de su casa, en lo que tardamos en llegar a Sweet Apple Acres, Greeny se quedó dormida sobre mí. Abrí la puerta de la casa, y me encontré a Applebloom y a Shine Comet, recogiendo un pequeño desastre, a lo cual, les pregunté con mi pizarra: "¿Qué ha pasado?"
-Digamos que... No se nos da bien las construcciones. -me respondía Shine.
Ante ello, le respondí: "Bueno, recoged todo, que mañana tenéis clases". Ambas asintieron sonriendo, y llevé a Greeny a su cama, tras ello, me fui a la cama, bastante cansado, me lo había pasado realmente bien con mis amigos.
Tras una larga noche, el gallo empezó a despertarnos con su canto al sol que Celestia elevaba. Cuando desperté, me sentí extraño, como si tuviera algo en la garganta, pero no sabía que. Como no tenía muchas ganas de levantarme, me tiré de nuevo sobre la almohada, pero el impacto, hizo que saliera una pluma de ésta, cayendo sobre mi nariz, eso, me provocó picor, y ganas de estornudar.
Nada más estornudar, se escuchó como si se tratase de una bomba, temblando un poco la casa. Ante semejante sonido, los Apple y mis hermanas corrieron hacia mi cuarto, atraídos por esa explosión sónica.
- ¡¿Qué ha pasado?! -decía asombrada la abuela Smith abriendo la puerta.
Cuando entraron, me encontraron estampado contra la pared, de espaldas a ella, bastante impresionado.
- ¡Hermano, ¿estás bien?! -me preguntaba Shine, intentando bajarme de la pared.
Cuando me bajó de la pared, me sacudí la cabeza un par de veces.
- ¿Qué has hecho, Loud? -me preguntó Applejack.
Tomé una actitud de ignorancia, y acto seguido, usé mi pizarra, diciéndole: "Una pluma cayó sobre mi nariz, me dio por estornudar y..."
- ¿Y qué? -preguntó Applejack.
Volví a usar la pizarra, para explicar: "Tuve voz". Ante esa declaración, todos quedaron impresionados.
- ¡Loud, pero esa es una gran noticia! -decía la abuela Smith. -Así por fin todos podrán entenderte.
-Pero eso no explica esa explosión, ¿qué ha pasado? -preguntó Shine Comet.
Quise decírselo usando mi pizarra, pero al estar llena de tiza, la sacudí con mi casco, levantando polvo de tiza, lo cual, provocó una tenue nube de tiza, produciéndome picor en la nariz otra vez. Tomé aire, y volví a estornudar.
El resultado, fue otra tremenda explosión sónica emerger de mi boca, lo cual, dejó casi ensordecido a todos. Me miraron asombrados, e incluso petrificados, pues aquello, no sólo era asombroso, sino aterrador.
Tras qué se recuperasen del sustó, Shine, usando su magia de materialización, me colocó un bozal en la boca, atándolo en mi cabeza.
-Con esto, creo que podemos evitar que abras la boca. -me decía Shine.
- ¿Mi hermano se va a quedar así para siempre? -decía asustada Greeny.
-Tranquila, pequeñaja, encontraremos una solución. -le decía Applejack tranquilizándola. -Pero por el momento, debemos descubrir como ha pasado esto, vamos a ir a ver a Twilight.
En cuanto Applejack mencionó aquello, llamaron a la puerta, así que nos dirigimos a ver que era. Al abrirla, no había nadie.
-Que raro, ¿quién habrá...? -preguntó Granny Smith.
-A... Aquí abajo. -decía una voz familiar.
Cuando la abuela miró al suelo, vió a Dust tirado en el suelo, como si hiciera esfuerzo.
-Pero Dust, ¿qué haces ahí tirado?
-Es... Es una larga historia... -decía con esfuerzos. - ¿E... Está Loud en casa aún?
-Si, espera aquí.
La abuelita Smith, me fue a buscar, y acto seguido, me acerqué a la puerta, y vi a Dust en el suelo, y él me vio con el bozal.
-Deduzco que hoy tampoco tienes un buen día.
Ante el comentario de Dust, asentí, así que alcé mi pizarra y le pregunté: "¿Y a ti qué te pasa?"
-Pues... No sé como decírtelo, pero... Hoy siento como sí pesase una tonelada. -me respondió.
Usé mi magia para levantarlo, pero realmente, pesaba una burrada, le dejé de nuevo en el suelo, he hice aparecer un carro, donde luego, coloqué. Pero luego, me pregunté si Brave Heart y Ruby también estarían raras hoy, así que le pregunté a Dust a través de mi pizarra: "¿Y qué hay de Brave Heart y Ruby?"
-Pues... Con respecto a Brave Heart...
De pronto, se pudo escuchar un ruido de temblores, como de tiritar, tras uno de los setos. Me acerqué a comprobarlo, para ello, toqueteé el seto, y de él, saltó hacia un lado, dando un leve chillido Brave Heart. Dust y yo, nos sorprendimos bastante, no nos esperábamos aquello.
-Ho... Hola chicos. -decía Brave Heart.
-Pero Brave Heart, ¿qué te pasa? -le preguntaba Dust.
-No lo sé, esta mañana me levanté con mucho miedo a todo. -le contestaba.
Esto, cada vez se estaba volviendo más surrealista, yo había adquirido una extraña habilidad para soltar ondas sonoras, Dust, pesaba una tonelada, lo que parecía que le impedía volar, y Brave Heart, le temía hasta su propia sombra. Sólo faltaba Ruby.
Tras colocarnos Brave Heart y yo el arnés para arrastrar el carro en donde estaba Dust, empezamos a seguir a Applejack con algo de esfuerzo, ya que nuestro amigo, nos dificultaba un poco la tarea.
- ¡Venga chicos, os creía más fuertes! -decía Applejack bastante adelantada.
- ¡Oh! ¿Se ha enfadado? Parece muy enfadada, tengo miedo... -decía Brave Heart agachando la cabeza
Me costaba mucho ver a Brave Heart en esa posición, simplemente, no parecía ser ella misma.
- ¡Vamos chicos, la estamos dejando atrás! -decía Dust.
En eso, le respondí con mi pizarra: "¡Iríamos más rápido sin arrastrarte!"
-Tengo miedo a las discusiones... -continuaba Brave Heart.
-Bueno Loud, aún no nos has dicho que te pasa a ti. -me dijo Dust. - ¿Porqué llevas ese bozal?
Le respondí en mi pizarra, explicándole de que por fin tenía voz.
- ¡Loud, pero eso es maravilloso! No entiendo por que no te quitad el bozal.
Asombrado ante ello, negué varias veces.
-Que aburrido eres. -me dijo.
A los pocos minutos, y con mucho esfuerzo, acabamos alcanzando a Applejack en la última colina a Ponyville, pero ante nuestros ojos, estaba Ruby, con cara de preocupación, y muy nerviosa, preocupados, nos acercamos.
-Ruby, ¿qué te pasa? . -le preguntó Applejack.
-Oh... Hola, Applejack, me alegra verte... Por aquí. -le respondía Ruby.
-Por favor, no me digas que tú también tienes miedo. -le preguntó Dust, tapándose los ojos con el casco.
-No... Es que... Me he perdido de camino a mi cuarto. -dijo.
Todos, la miramos sorprendidos.
-Eh... Preciosa, sabes que estamos en medio del sendero a Ponyville, ¿no? -le dijo Applejack.
-Ah... Ya decía yo que esta no era no mi cocina, esa nube no me sonaba. -dijo Ruby.
Dust, Brave Heart, y yo, nos llevamos el casco a la cara, haciendo un Hooves Face, de lo absurdo que hacia resultado esa respuesta.
- ¿Te levantaste extraña esta mañana también? -le preguntó Dust.
-Si por rara te refieres a perder el sentido de la orientación... Sí, me he levantado rara hoy. -fue la respuesta de Ruby.
-Esto cada vez se pone más raro. -seguía Brave Heart.
-Anda Ruby, ven conmigo. -le decía Applejack.
Continuamos caminando hasta que llegamos a la entrada de Ponyville, ahí, Brave Heart y yo nos detuvimos, jadeando y resoplando, tratando de recuperar el aliento.
-Chicos... Que flojos sois. -decía Dust.
Ante su comentario, coceé el carro, provocando que cayera, cuando Dust tocó el suelo, este se hundió unos cuantos centímetros en el suelo, algo bastante poco frecuente.
-Perdón...
- ¿Y tenemos que ir al palacio de la princesa Twilight así? -preguntó Brave Heart pateando el suelo con el casco. -Seguro que la molestaremos...
-No te preocupes, preciosa, seguro que estará encantada de ayudarnos. -contestaba Applejack. -Tú conmigo Ruby, que si no, te pierdes.
Applejack, empezó a caminar con Ruby sujeta de su cola, para evitar que se perdiera, mientras que nosotros, empezábamos a volver a levantar a Dust del suelo, con mucho esfuerzo le volvimos a colocar sobre el carro que creé.
En ese momento, Rose, la dueña de la floristería en la que trabajaba Brave Heart, se nos acercó.
-Hola Brave Heart, ¿qué estás haciendo? -le preguntó.
-Bueno... Es algo largo que contar. -le contestó Brave Heart, ocultándose un poco tras de mí.
-Bueno, recuerda que esta tarde tienes turno en la floristería.
-Si, jefa.
Rose, pasó por mi lado, dándome sin querer en el morro con el ramo de rosas que llevaba, dándome picores en la nariz. Empecé a coger aire, el estornudo estaba próximo.
- ¡ACHUS!
El bozal, estalló con el retumbe de mi voz, y no fue lo único, la onda sonora, se expandió por todo Ponyville, reventando algunas ventanas y cristales, dejando a toda la población, asombrada, y estupefacta, mirándonos con cara de enfado.
Bajé la cabeza avergonzado, y empecé a tirar del carro junto con Brave Heart.
-Ya... Ya entiendo porque llevabas el bozal. -decía Dust, entendiendo por fin.
Al escuchar el ruido que produje, Applejack fue corriendo hacia mí con Ruby.
-Ay... Supuse que habrías sido tú, Loud.
Aparté la vista, apenado por lo ocurrido.
-No te preocupes, vamos, el castillo de Twilight está ya cerca.
Anduvimos durante un rato, pero con la mirada de mosqueo de los demás Ponys sobre mí, algo que me ponía nervioso. Al poco, llegamos al castillo de Twilight, ahí, Spike nos recibió, llevándonos a la sala de los tronos, ahí, estaban Fluttershy y Rarity, sentadas en sus tronos, las cuales nos recibieron junto a Twilight.
-Hola chicos, ¿qué os trae aquí? -preguntó Twilight.
-Tenemos un problema con ellos cuatro. -decía Applejack señalándonos. -No sabemos que ha pasado, pero los cuatro están raros.
En eso, Rarity se acercó a nosotros, observándonos con determinación.
-Mmm... A excepción de Dust, que esta tumbado sobre un carro, yo diría que los cuatro están bien. -decía sonriendo y agitando su melena de un lado a otro.
Cuando la agitó sobre mi morro, pude apreciar un fuerte olor a perfume provenir de ella, lo cual, empezó a provocarme el estornudo. Al percatarse de aquello, Applejack, Brave Heart, y Ruby, se ocultaron tras el carro junto a Dust, preparándose para lo peor, entonces, solté nuevamente un estornudo, soltando una tremenda onda sonora, lo cual, hizo retumbar las pareces de todo el castillo, ante ello, Twilight tuvo que hacer uso de su magia para estabilizar todo el castillo, pero el peinado de Rarity, no corrió esa suerte, dejándolo tieso hacia atrás.
-Mi... Mi... ¡Mi pelo! -decía asombrada, intentando recuperar su peinado.
-Applejack, ¿qué les ha pasado? -preguntó Twilight.
-No lo sé, al menos en el caso de Loud, despertó esta mañana así. -le contestó.
-Mmm... Chicos, ¿qué hicisteis ayer? -nos preguntó Twilight.
-Pues fuimos al bosque Ever Free. -respondió Ruby. -Estuvimos en un claro precioso, rodeado de flores azules.
-Ahí Brave Heart y yo, nos revolcamos en esas flores. -continuó Dust. -Y luego, comimos unos sándwiches.
- ¿Flores azules? -preguntó Twilight. - ¿Qué tipo de flores?
En eso, saqué mi cuaderno de dibujo, y busqué la página de aquel dibujo, finalmente, lo encontré, y se lo mostré a todos.
- ¡Madre mía! ¡Ésta no es una flor cualquiera! -decía Twilight mostrando el dibujo. - ¡Ésta planta, se llama Broma Venenosa!
- ¿Qué venenosa? -preguntó Dust.
-Nosotras ya tuvimos un incidente con la planta. -dijo Fluttershy. -Es una extraña flor que gasta una broma pesada dependiendo de cada uno.
-Ya veo. -decia Ruby. -A mi me ha quitado mi sentido de la orientación, y sin él, no puedo ir por las cuevas sin perderme.
-A mi me ha hecho tan pesado como el plomo, así no puedo volar, ¿cómo voy a ser un pegaso de rescate así? -preguntaba Dust.
-A mi me ha quitado el valor... -decía apenada. - ¿Así cómo puedo ser de la guardia real?
Las demás, se quedaron mirándome.
-Tu mejor no digas nada. -me dijo Rarity, sin poder reprocharle nada.
-El caso de Loud, es una broma de muy mal gusto. -declaraba Twilight. -Pero tranquilos,por suerte, nuestra amiga Zecora, nos dejó la receta contra la Broma Venenosa, vamos al SPA, ahí os tratarán.
Seguimos a Twilight hacia el SPA, durante el camino, todos mantuvieron un poco la distancia conmigo, pese a que tiraba del carro de Dust.
-Creo que eres el centro de atención, amigo. -me dijo Dust.
Yo, simplemente, resoplé, sabía que lo que estaba ocurriendo, era a causa de mi "increíble" habilidad adquirida, si se podía decir así.
-Ya casi hemos llegado, chicos, en un rato os podréis curar. -nos decía Twilight.
-Pensé que el SPA estaba por esa dirección. -decía Ruby.
-No cariño, es aquí. -le corregía Rarity.
Al tocar la puerta, nos abrieron las dueñas del local, al escuchar nuestro problema, inmediatamente se pudieron manos a la obra, ¿quién me iba a decir que el remedio era un simple baño de burbujas?
Primero, entre todos intentamos meter a Dust en la bañera, ya que era el más pesado. Una vez lo metimos, parecía que se estaba volviendo tan ligero, hasta recuperar su peso natural. La siguiente, con algo de miedo, fue Brave Heart, que nada más tocar el agua, el valor le volvió a latir. A continuación, Ruby fue la siguiente, algo perdida, consiguió meterse en la bañera, recuperando su sentido de la orientación. Por último, fui yo, pero... No sentí ningún cambio o algo en especial.
- ¿Estás bien, Loud? -me preguntó Applejack.
No dije nada por miedo a que pasara lo de antes.
-Bueno, sólo hay una forma de saberlo. -dijo Brave Heart.
En eso, sujetó entre sus dientes una de las plumas de las alas de Dust.
- ¡Eh! -quejaba.
Tras ello, me empezó a hurgar la nariz con la punta, empezando a provocarme el estornudo. Ante ello, todos salieron corriendo de la bañera, para ocultarse, y Twilight, levantó un campo de fuerza alrededor de la bañera, entonces, estornudé con la onda sonora, destrozando con ella la bañera.
Todas quedaron estupefactas al ver que en mí, no funcionaba de la misma forma que el resto la fórmula contra la Broma Venenosa.
-Pero... Esto es imposible. -decía impresionada Twilight. -Se supone que con esto tendrías que estar curado de la Broma Venenosa.
-Eh... Ahora que lo mencionas... Creo que Loud en ningún momento se revolcó en las flores. -dijo Ruby.
-Pero entonces... Su explosión sónica no tiene sentido.
-Bueno, yo vi algo raro. -dijo Brave Heart. -Recuerdo que el viento empezó a soplar con fuerza, y los pétalos empezaron a volar, y uno de ellos se coló en el sándwich de Loud.
- ¡¿Qué se lo comió!? -dijeron los demás impresionados.
-Entonces, eso quiere decir que la cura no funciona en aquellos que se la hayan comido. -observaba Twilight.
-Esto es de locos, ¿cómo se supone que debíamos saber eso? -decía Applejack.
-No perdamos la calma, seguro que Zecora tiene la solución para ello. -decía Twilight manteniendo la calma, algo que agradecía.
Twilight levantó el campo de fuerza que me cubría, liberándome de él.
-Vamos Loud, iremos a casa de Zecora, todos.
-Claro, no pienso dejar a mi amigo en la estacada, y menos con éste problema. -decía Dust, cubriéndome con su ala.
Ante ello, esbocé una sonrisa, había escogido bien a mis amigos.
-Y... ¿Dónde vive esa tal Zecora? -preguntó Brave Heart.
-En el interior del bosque Ever Free. -respondió Rarity.
-Puede ser peligroso, así que, vosotros cuatro, no os separéis. -nos dijo Twilight. -Sólo espero que esté en casa.
Emprendimos el viaje hacia la casa de esa tal Zecora, los Ponys de Ponyville, me seguían observando con enfado, en eso, Brave Heart y Ruby, salieron a mi defensa.
- ¡¿Se puede saber que os pasa?! -dijo Brave Heart.
- ¡Sólo tiene un mal día, dejadlo tranquilo que ya bastante mal se siente! -continuaba Ruby.
-No les hagáis caso. -dijo Twilight. -Luego les explicaré lo ocurrido.
-No sé si Loud aguantará hasta entonces. -continuó Dust andando a mi lado.
Una vez en el bosque, las chicas, sin contar a Brave Heart y Ruby, estaban algo asustadas, no parecían sentirse cómodas en el, en cambio, nosotros estábamos acostumbrados a ir a explorar.
-No entiendo por qué le tenéis miedo a este bosque. -decía Brave Heart. -Tampoco es que esté tan mal.
-Es que no es tan natural. -decía Fluttershy. -Los animales se cuidan solos, las nubes se mueven solas...
-Pero... Sí eso es de lo más normal. -contestó Dust.
-Se nota que sólo habéis rozado la superficie del bosque. -contestaba Rarity. -Las cosas aterradoras están en el interior del bosque Ever Free.
- ¿Cómo qué? -le preguntó Brave Heart.
De pronto, se escuchó un rugido ensordecedor provenir de cualquier parte del bosque. Estuvimos viendo a todas direcciones.
- ¡Por el amor de Celestia! Espero que no sea un lobo de madera. -decía Rarity.
-E... Eso ha sonado demasiado grande para ser un lobo de madera. -aclaraba Fluttershy.
-Y no huele a moho. -continuó Ruby.
Podíamos oír un sonido, como si una cosa enorme se arrastrase por el suelo. Agudicé el oído para intentar localizarlo, y lo conseguí, estaba a nuestra derecha, así que lo señalé con mi casco.
- ¿Qué pasa Loud? -preguntó Fluttershy
Todos miraron hacia donde señalaba, había un enorme cuerpo reptando por el bosque.
- ¿Qué ha sido eso? -preguntó Rarity.
-No estoy segura, pero sea lo que sea, sabe que estamos aquí. -contestó Brave Heart.
Los árboles, empezaron a apartarse, como si una fuerza bruta los empujase, ante nosotros, se nos presentó una enorme serpiente, con los ojos en blanco.
- ¡Un basilisco! -gritó Fluttershy.
El basilisco se nos vio, relamiendo se la boca con su viperina lengua, sabíamos a lo que iba, a comernos. Cuando se preparó para atacarnos, empezamos a correr cada uno por un lado, intentando escapar. Dust y Fluttershy, salieron volando para evitar que lo alcanzase, el resto de las chicas, se desperdigaron en varias direcciones, con la esperanza de confundirlo, por otro lado, yo salí corriendo hacia un montón de rocas, esperando que no me siguiera, pero tonto de mi, que a por mí fue.
Intenté escalar aquel risco, pero me era imposible, y tenía al basilisco encima.
- ¡Loud, tranquilo, y hagas lo que hagas, no le mires a los ojos! -me decía Twilight.
Inmediatamente, cerré los ojos, antes de que el basilisco dejase al descubierto sus ojos rojos, intentando clavar su mirada en mi. El basilisco, resoplaba sobre mí, empapándome en su aliento para que abriera los ojos, en eso, Dust le coceó la cabeza, provocándole perder su interés en mi.
- ¡Aléjate de él, gusano súper desarrollado! -le gritó.
El Basilisco, lanzó mordiscos al aire, intentando cazar a Dust, pero éste, los esquivaba ágilmente, mientras que, entre Ruby, Rarity y Twilight, le atacaban usando su magia.
- ¡Ahora Loud, sal de ahí! -gritó Rarity.
Salí corriendo, pero el basilisco se percató, y se lanzó hacia mí, en dos ocasiones, estuvo a punto de alcanzarme a mordiscos la cola, podía oír como sus mandíbulas se cerraban con energía.
- ¡Si no hacemos algo, se lo comerá! -decía nerviosa Ruby.
Twilight, pensó un instante, y entonces, lo dijo.
- ¡Loud, grita!
Todos quedaron sorprendidos ante lo que dijo Twilight, incluso yo.
- ¡Tu hazlo! -repitió.
Cuando me quedé lo suficientemente separado del basilisco, como para evitar ser alcanzada por sus colmillos, me giré cerrando los ojos, y tomé una buena bocanada de aire. Cuándo el basilisco estuvo frente a mí, solté mi primer grito en toda mi vida, pero gracias al efecto de la Broma Venenosa, ese grito resonó por casi toda Equestria como una explosión, y en cuanto al basilisco, estaba tirado en el suelo, totalmente ensordecido y noqueado, el resto, gracias a Twilight, estaban protegidos del tremendo impacto.
Al ver el desastre que provoqué, rápidamente adopté una actitud de vergüenza.
-No te preocupes, eras tú, o él. -me decía Brave Heart dándome ánimos.
-Bueno, ya que hemos despejado el camino, sigamos hasta la casa de Zecora.
- ¿Y su búsqueda a que se debe? Si saber se puede. -dijo una voz misteriosa.
Cuando la polvareda se disipó, apreciamos la figura de lo que parecía ser una cebra.
- ¡Zecora! Cuanto tiempo. -decía feliz Twilight.
-Me alegro de verte princesa. -contestaba Zecora. -Dime, ¿cuál es el problema?
Twilight, le estuvo explicando mi problema a Zecora.
-Mmm... No logro comprender, una potente voz pudo obtener, ¿por qué iba a ser una maldición? Más bien parece una bendición. -decía Zecora observándome de cerca.
-Pero no es nuestro Loud Off. -saltó de inmediato Dust. -Es cierto que con voz podría por fin hablarnos, pero...
-Pero no sería el Loud al quien tanto queremos. -continuó Brave Heart.
-Ni el Loud con el que hicimos la promesa de ser mejores amigos para siempre. -terminaba Ruby.
Esas palabras, me llegaron al alma, consiguiendo sacarme una sonrisa. Zecora, les regaló una sonrisa de satisfacción ante esas palabras sinceras.
-Creo tener en mi choza la solución, pero lo aviso, no será de agradable sensación.
Todos, seguimos a Zecora hasta su casa, pero una vez en la puerta, sólo nos dijo a Twilight y a mí que entráramos, los demás, esperarían fuera. El interior de la casa de Zecora, era realmente curioso, lleno de brebajes y plantas medicinales, y algunas máscaras, algunas aterradoras y otras simplemente simpáticas.
- ¿Cómo podemos solucionar el problema de Loud? -preguntó Twilight.
Zecora, lanzó frente a nosotros, un viejo y oxidado cubo, realmente, no sabía a donde quería llegar con eso.
-No es común que nadie coma la Broma Venenosa, y la solución no es nada graciosa. -respondía Zecora. -Si su problema quiere solucionar, la solución está en vomitar.
Me quedé sorprendido ante su respuesta, no me hacía ninguna gracia esa última parte de su improvisada, aunque bien lograda prosa.
Los demás, estaban esperando fuera con impaciencia, de pronto, empezaron a oír ruidos proceder del interior de la choza, ruidos de resistencia.
- ¡Loud, estate quieto! -gritaba Twilight.
-Es la única solución, tranquilo y pórtate como un campeón. -se le oía decir a Zecors desde fuera.
El silencio se hizo presente de repente, y al poco se me pudo oír vomitar dentro del cubo. Casi inmediatamente después de empezar a vomitar, Zecora abrió la puerta, permitiendo la entrada a los demás, viéndome sobre la mesa, sujetando el cubo.
- ¿Pero qué le habéis hecho? -preguntó Applejack.
-Un trozo de carbón le he hecho tragar, para que la Broma Venenosa consiguiera expulsar. -respondía Zecora.
Yo, no podía parar de vomitar, con la cabeza hundida en cubo.
-Se le conoce como lavado de estómago, se lo deja revuelto, pero limpio como los chorros del oro.
Esa solución, realmente no me había hecho gracia.
-Tranquilo pequeño, el Veneno se disipara pronto. -decía Zecora acariciando mi espalda con su casco. -Enorgullécete de tener buenos amigos que te quieren.
Ante ello, no podía hacer más que darle la razón, mis amigos me querían por cómo era realmente.
-Vas a necesitar una buena comida tras soltar todo el veneno. -decía Dust.
Hundí la cabeza en el cubo, soltando por completo el veneno, tras eso, la saqué, jadeando y babeando un poco, entonces, Zecora, me hizo beber algo de agua para relajarme la garganta y el estómago, y luego, unas bayas, para volver a llenarlo.
-En cuanto recobres el aliento, ten y sacia el apetito. -me dijo Zecora, sonriéndome.
Cuando lo recuperé, hambriento, me comí aquellas dulces bayas, tan jugosas como las manzanas de la granja.
-Ya pasó, Loud. -decía Twilight, acogiéndome bajo su ala.
A la hora después de que empezase a devolver el veneno, emprendimos el camino de vuelta a Ponyville, no, sin antes, darle las gracias a Zecora por la ayuda prestada.
-No ha sido nada Loud, ha sido un placer ayudarte. -contestó. -Seguro que nuestros caminos volverán a cruzarse.
Le devolví la sonrisa, y continué mi camino con los demás.
-Mmm... Esos cuatro se ven unidos, me preguntó.... Que acontecimientos les serán avenidos. Una poderosa magia capto en ellos...
Al volver a casa, mis hermanas esperaban con impaciencia, tras una pequeña barricada que los demás Apples habían levantado por si acaso.
- ¿Pero se puede saber que habéis hecho? -les preguntó Applejack.
- No te preocupes, es sólo por si acaso. -le respondió. - ¿Ya habéis solucionado el problema de todos?
Ante esa pregunta, Applejack y yo, nos compartimos una mirada de cómplices.
-Pues no sé... ¿Tú qué dices, Loud?
Me coloqué en posición, los Apple, se escondieron de inmediato tras su pequeña barricada esperándose lo peor. Cuando abrí la boca para hablar, ni un sólo ruido fue emitido, ante esa gran noticia, mis hermanas fueron a por mí.
- ¡Nuestro hermanito ha vuelto! -decían las dos abrazándose a mis patas delanteras.
-Menos mal, así no tendré que asegurar la granja contra explosiones sónicas. -declaró la abuelita Smith con una sonrisa dibujada en su rostro.
-Eh... ¡Sip!
Todos, rieron a la vez que yo les obsequiaba con una sonrisa que iluminaba mi cara. La verdad, la simple idea de tener voz por fin, me había tentado, pero, no deseaba aquella explosión a cada palabra, y... Aquella experiencia me había enseñado que, no necesito tener voz para que todos me entendieran, sólo, necesitaba confiar en mí mismo, en todos mis amigos, y en mi querida familia, quienes me amaban, por ser como soy, sin necesidad de ser como los demás, pero sí único.